Sí, contra aquellos detractores del sistema. Lo determinó un estudio de las Universidades de Ohio y California.
Y pensar que hay lugares en donde está prohíbido. Lo condenan cual curva de productividad. Pero otros se empiezan a dar cuenta de su verdadero uso (y, quizás, que el empleado si se quiere distraer tiene otros 10 mil motivos). Ahora, un estudio de las Universidades de California y Ohio lo certifica: ¡El Messenger es productivo!
El estudio se realizó entre casi mil personas, y entre mayo y septiembre de 2006 y se da a conocer recién ahora. El estudio demuestra que las personas que lo utilizan durante su jornada de trabajo tienen “menos interrupciones” que las que no lo utilizan. Justamente, a contramano de una de las grandes excusas que tienen quienes cortan el servicio.
El Messenger, desde nuestra visión, puede tener un uso responsable o no, pero el balance es claramente positivo: permite comunicaciones rápidas, informaciones concisas, contactar gente que estuvo desconectada de nosotros (y a la que no llamaremos) y muchas otras cosas más.
Y encima ahora tiene sustento científico: las 912 personas encuestadas trabajaban, al menos, 30 horas a la semana, utilizando durante su jornada laboral la computadora.
Fuente: http://www.datafull.com/
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