El iPhone, el placer de parecer y no de ser

Claro y Movistar dicen que lo tendrán en nuestro país el 22 de agosto. La lucha por etiquetarlo a nombre propio.

Por Sebastián Davidovsky

Ya lo escuchamos varias veces: el iPhone viene a la Argentina. Indudablemente que ya está, que hay algunos importadores precarios que lo trajeron desde el lejano occidente. Allí donde el consumo se compra como un Fantoche. Allá donde el iPhone se vende como alfajor. Sin embargo, cuando decimos ser, no decimos parecer: cuando decimos traer a la Argentina nos referimos a las empresas operadoras que lo podrían traer. Claro, Movistar y Personal.

Las dos primeras (Claro y Movistar) salieron nuevamente a decir que tendrán el teléfono para el 22 de agosto. Lo habían dicho, recordémoslo, para el 1 de julio, para fines de julio. Ahora es el 22 de agosto. Viernes. De última si ese día no ocurre, después vendrá el fin de semana. Y todo quedará olvidado, pero asentado.

Y qué quiero decir con asentado. En definitiva, es lo más importante que tiene una marca. Hay varias marcas de ropa que venden una misma marca, pero con diferente etiqueta. En este terreno, las compañías intentan ponerle su etiqueta al iPhone, el teléfono más emblemático de la historia. Y si no lo tienen, al menos aparentan que lo tienen.

Claro, por ejemplo, organizó una “pre venta” en Internet en donde los usuarios sólo tenían que registrar su nombre y “desear” el iPhone. No más que eso para decir que ya 20 mil usuarios “encargaron” el teléfono. Un teléfono que, hasta esa fecha (me atrevo a decir hasta hoy), no tiene una fecha definitiva de llegada a la Argentina. Y menos aún, a los usuarios.

Ni siquiera tiene precio. Nadie se atreve. Encima, en el medio existe una disputa existencial por la torta: ¿a manos de quién irán todos los consumos que los usuarios 3G harán con el teléfono? ¿A las compañías? ¿A Apple? ¿A quién? Al igual que ocurre en la esfera de las consolas de videojuegos, lo importante no será quién vende más Wii, PS3 o Xbox 360. Lo importante será quiénes consuman más a través de ellas. Una frase no pronunciada del marketing dice: la primera vez se compra; la segunda, la tercera, la cuarta, se consume, se consume, se consume.

Mientras Apple negocia con las tres compañías y cada una hace uso y abuso de los mensajes para apropiarse más de un producto que de una promesa, los usuarios siguen esperando. Esperemos que el 22 de agosto sea la fecha definitiva. Pero mientras tanto habrá que ir pensando qué van a hacer ese fin de semana.

Fuente: http://www.datafull.com/